viernes, 14 de septiembre de 2012


Arquidiócesis de Tegucigalpa/ Decanato Zona Periférica
Parroquia Cristo Rey y la Santa Cruz

24vo. Domingo de Tiempo Ordinario/ Ciclo B


Domingo  16 de septiembre 2012

“TU ERES EL MESÍAS”.
Queridos hermanos y hermanas, bienvenidos a la Casa del Señor, la casa de los discípulos y misioneros del Mesías de Dios nuestro Padre.
En las palabras de Pedro encontramos el corazón del mensaje del mensaje de este Domingo: “Tú eres el Mesías”.  Y en los demás textos profundizamos sobre su sigificado:
-- El texto del profeta Isaías nos recordará que  en la victoria de este Mésías encontraremos la fortaleza para luchar por el reino de los cielos a pesar de las oposiciones aún violentas en esta tierra.
-- Con el salmista proclamaremos que solo un corazón agradecido puede ser fiel a este Mesía, pues solo la gratitud fortalece la fe y renueva nuestro compromiso con Él.
-- Por su parte, el Apóstol Santiago nos pondrá en evidencia que solo puede decir que tiene fe en este Mesías quien practica sus mismas obras de solidaridad y liberación.
¿Cómo se refleja nuestra fe en Jesús Mesías en nuestra propia vida?
Recibamos, pues, al P._____ y a quienes le acompañan en la procesión de entrada. De pie, cantemos.

Moniciones a la Palabra de Dios
1era. lectura                            Is. 50, 5-9a
Ser discípulo de Dios, formado en la escucha fiel de su Palabra, es saber tanto consolar al que sufre como de resistir al violento. Es mantenerse firme en la misión encomendada, superando ya sea la hostilidad o la agresión. Es creer contra toda evidencia en el triunfo del Señor.

Salmo                                     114
La gratitud alegra el corazón. La gratitud nace la capacidad de reconocer los dones recibidos. La gratitud refuerza la confianza pero sobre todo renueva la fidelidad hacia Dios. Regocijemonos con este salmo y cantemos radiantes al Dios que nos salva.

2da lectura                             Sa. 2, 14 - 18
De la misma manera que el día y la noche no se oponen sino que se complementan, de igual manera, la fe y las obras se confirman la una con la otra. Las obras que brotan de la fe no son posibles sin esta, así como no se puede tener fe sin dar los frutos que la confirman y que la misma fe exige.

Evangelio                               Mc. 8, 27 - 35
A veces al comparar algo confundimos su sentido. Por eso decimos que “no todo lo que brilla es oro”. De ahí la importancia de una continúa experiencia personal con Jesús: para no denigrarlo ni perder su mensaje en nuestras vidas. Recordando siempre que no se puede comprender a Jesús sin su cruz.

Oración de los fieles
A cada intención responderemos: “escucha Padre el clamor de tu pueblo”.
v  Para que las palabras del Papa Benedicto, los obispos y sacerdotes, anuncien siempre con valor la verdad del evangelio, denuncien proféticamente las injusticias sociales y nos enseñen una vida recta y justa en Cristo. Oremos…
v  En este mes de Septiembre, el Papa nos pide orar por los políticos: para que actúen siempre con honradez, integridad y amor a la verdad; y por las iglesias pobres: para que aumente entre nosotros la disponibilidad al envío de misioneros, sacerdotes y laicos, y de recursos concretos a estas iglesias más pobres. Por las intenciones del Papa para este mes de Septiembre,  Oremos…
v  En este mes de la patria, oremos particularmente por nuestras comunidades católicas, para que en comunión con todos los que luchan por la justicia social y el bien común, asumamos con valor, audacia y creatividad, la misión que Cristo nos encomendó de hacer de esta Honduras un país en santidad, justicia y paz  para todos. Oremos…
v  En nuestra plegaria por quien más sufre tengamos particularmente en cuenta a los migrantes: que sus sacrificios no sean en vano y alcancen el bienestar anhelado, que no olviden a  sus familiares y que pronto puedan en paz volver a sus hogares. Oremos…
v  Te suplicamos, Padre, por esta tu amada parroquia de Cristo Rey y la santa Cruz. Que bajo la guía y el buen ejemplo de sus sacerdotes, sepamos crecer en fidelidad a la palabra de Dios y demos los frutos que nuestra fe exige por la renovación parroquial y la nueva evengelización. Oremos…






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